Bueno antes que nada decir que bajo este título súper gaditano y súper semana santero, escribiré asiduamente lo que se me ocurra, bajo mi opinión personal y por supuesto relacionado con temas cofradieros.
Maratón fondista del Domingo de Ramos.
Ya es bien sabido que este Domingo de Ramos en Cádiz se cumplirá el dicho, supongo que universal, de “Quien no estrena en Domingo de Ramos se le caen las manos”. Bueno pues la ciudad haciendo uso de este dicho y después de la hartá de años sin estrenar Cofradía de penitencia, Cádiz estrenará Cofradía.
Esta se va a convertir en el símil a la Hermandad del Cerro sevillana, para convertirse en la Salesiana gaditana. Y digo símil refiriéndome a la distancia que tendrá que recorrer desde su sede Canónica hasta el final de la carrera oficial, muy cerquita esta del antiguo campo de la Jara.
No es que a mi me asuste el maratón que tendrán que realizar para llegar desde el colegio Salesianos ida y vuelta, la verdad es que si lo miramos bien, cualquiera de esas personas de ruta del colesterol diario pueden decir que es una caminata mas o menos normal. El peso del paso se puede aliviar poniendo los suficientes relevos para que las personas vayan descansando del esfuerzo, es decir lo concerniente al paso de misterio es remediable y lo suficientemente estudiable por el capataz para que el paso vaya y vuelva.
Pero el maratón si no se tiene pensado convenientemente, será el lento y pausado caminar, el pasito lento y de lado a lado al que nos vienen acostumbrando algunos pasos, que bailan hasta el redoble del tambor, que si midieran los metros que dan hacia los lados es mas que los metros que avanzan con un paso normal.
Así que yo creo que la Cofradía debe de pensar, si no lo han hecho ya, un poquito en esos Hermanos nazarenos. Pensar que cuando la cofradía haya salido le queda volver, que los cargadores no lo es todo y ni mucho menos los que cargan con el peso de la estación penitencial, que llevar un cirio y caminando mas lento que el caballo del malo, es inhumano y mas cuando se hace por un capricho o un vacile.
Por eso yo siempre me he posicionado con poner las trabajaderas, porque de ese modo el cargador posee mas libertad para caminar con el paso a cuestas pues no lleva a nadie pegado echándole el bahío en el cogote. Un paso con trabajaderas es mas cómodo para cargar, es mas cómodo para que la Cofradía avance y es mas cómodo para los espectadores, ya que a veces nos resulta excesivamente monótono ver como una procesión con no mas de 200 nazarenos tarda mas en pasar que cualquiera de otra localidad que llevan 1000 nazarenos en sus filas, y eso, parafraseando a Rajoy ¡es un coñazo !
“A la pá de Dio”
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