No soy un Rociero confeso, pero si admiro a los Rocieros. La forma de expresar la Fe en su máximo exponente tanto en la peregrinación en si, en la convivencia previa y la salida misma, es algo que por lo menos es para mi, alabable.
El Rocío tiene una cosa buena y es que no deja a nadie indiferente, yo que por dos veces he estado en la aldea en sus noches mágicas, puedo decir que se palpa mucha Fe, que las sensaciones que se viven ante la Reina de las marisma son indescriptibles, y que para realizar una critica objetiva se debería de estar una sola vez mirando a los ojos a la Blanca Paloma, entonces podremos decir que o no me gusta ese ambiente que roza muy de lleno al folclorismo o que ese movimiento alegre da alas a unos devotos a seguir rezando a la Virgen de la mejor manera que los saben hacer los andaluces, cantando y bailando.
Siempre que he podido he visto la salida de la Hermandad de Cádiz destino a la ciudad para presentar sus respetos a la Patrona y despedirse de los gaditanos. Recuerdo que durante algunos años trabajando en los Jardines de Varela, por aquellos entonces estos jardines poseían unos hermosos rosales de las que hoy lamentablemente carece. Cada año llenaba un par de sacos de bolsas de comunidad con pétalos de las que inminentemente se iban a marchitar, y se los entregaba a un Hermano que previamente me las solicitaba para realizar una petalada. Y por supuesto en el transcurrir de la peregrinación dejaba mis labores y me ponía a ver como los Rocieros gaditanos marchaban alegres en su principio a pedir a la Patrona gaditana un buen final para lo que le quedaba aun por llegar.
Pero hoy que la Virgen volverá a ser mas dueña si cabe de las marismas de Doñana, ser la onubense mas reconocida y la andaluza mas universal, me voy a acordar de un amigo y compañero, Juan Aragón Pina.
Y hoy es tu día Juan porque tu eres verdad y Fe, eres sacrificio y compromiso, eres solidario y terco ante tu lucha. Eres Rociero porque crees en la vida comunal, eres Rociero porque en los caminos de tu vida te han zancadilleado y solo ha servido para que tus amigos te crean más, porque eres capaz de sobreponerte ante todo y resucitar para los que te creían muerto.
Juan cuando vea a la patrona de los almonteños en su Ermita, seguro que pensará que gracias a la verdad y gracias a Dios la puedes gozar in situ y tener en sus oraciones. Juan simplemente es el espíritu revolucionario de la vida, del trabajo y de sus benditas causas.
“A la pá de Dió”
El Rocío tiene una cosa buena y es que no deja a nadie indiferente, yo que por dos veces he estado en la aldea en sus noches mágicas, puedo decir que se palpa mucha Fe, que las sensaciones que se viven ante la Reina de las marisma son indescriptibles, y que para realizar una critica objetiva se debería de estar una sola vez mirando a los ojos a la Blanca Paloma, entonces podremos decir que o no me gusta ese ambiente que roza muy de lleno al folclorismo o que ese movimiento alegre da alas a unos devotos a seguir rezando a la Virgen de la mejor manera que los saben hacer los andaluces, cantando y bailando.
Siempre que he podido he visto la salida de la Hermandad de Cádiz destino a la ciudad para presentar sus respetos a la Patrona y despedirse de los gaditanos. Recuerdo que durante algunos años trabajando en los Jardines de Varela, por aquellos entonces estos jardines poseían unos hermosos rosales de las que hoy lamentablemente carece. Cada año llenaba un par de sacos de bolsas de comunidad con pétalos de las que inminentemente se iban a marchitar, y se los entregaba a un Hermano que previamente me las solicitaba para realizar una petalada. Y por supuesto en el transcurrir de la peregrinación dejaba mis labores y me ponía a ver como los Rocieros gaditanos marchaban alegres en su principio a pedir a la Patrona gaditana un buen final para lo que le quedaba aun por llegar.
Pero hoy que la Virgen volverá a ser mas dueña si cabe de las marismas de Doñana, ser la onubense mas reconocida y la andaluza mas universal, me voy a acordar de un amigo y compañero, Juan Aragón Pina.
Y hoy es tu día Juan porque tu eres verdad y Fe, eres sacrificio y compromiso, eres solidario y terco ante tu lucha. Eres Rociero porque crees en la vida comunal, eres Rociero porque en los caminos de tu vida te han zancadilleado y solo ha servido para que tus amigos te crean más, porque eres capaz de sobreponerte ante todo y resucitar para los que te creían muerto.
Juan cuando vea a la patrona de los almonteños en su Ermita, seguro que pensará que gracias a la verdad y gracias a Dios la puedes gozar in situ y tener en sus oraciones. Juan simplemente es el espíritu revolucionario de la vida, del trabajo y de sus benditas causas.
“A la pá de Dió”
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.- Desde este blog queremos hacer mención expresa a Jesús Savona, Cofrade, Rociero y amigo, que un desafortunado accidente no le ha permitido gozar este año de la presencia de la Virgen el Rocio en su salida procesional por la aldea Almonteña. Asi como desearle una pronta y satisfactoria recuperación
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